Qué es y qué hacen los esteroides

Julia Arpi, especialista en medicina ortomolecular y estética, nos cuenta que los anabólicos esteroides son derivados sintéticos de la testosterona, una hormona sexual masculina. Los esteroides son una sustancia muy usada entre los deportistas, sobre todo en quienes se dedican al culturismo, debido a que aumentan el rendimiento físico, la fuerza y la hipertrofia muscular.

Cuando se utilizan al nivel que los incorpora un fisicoculturista, empiezan a aparecer efectos adversos. Una de ellas es la producción aumentada de estrógenos (un grupo de hormonas clave en la salud reproductiva femenina) que, en varones, genera una dominancia estrogénica que aumenta el riesgo de cáncer de próstata y de hiperplasia prostática benigna, una enfermedad que puede ocasionar una infección, cálculos en la vejiga y, en menor medida, reducción de la función renal.

 

Si se utiliza en dosis suprafisiológicas (es decir, más de lo que el cuerpo precisa), aumenta para la persona el riesgo cardiovascular. También, con el tiempo, suele ocurrir  un deterioro en la función hepática, que puede derivar en una hepatitis farmacológica por disfunciones en el hígado. Por último, las personas que hacen un uso crónico de los esteroides son susceptibles a tener presión alta y ACV.

Por eso, antes de comenzar a usar esteroides, es recomendable ver a un médico que indique las dosis acordes a cada organismo.

¿Sos Adicto?

Esta es una pregunta que sólo tú puedes contestar. Todos hemos contestado «sí» a distinta cantidad de preguntas. El número en sí no tiene tanta importancia como el hecho de saber cómo nos sentíamos por dentro y cómo la adicción había afectado nuestra vida. En algunas de estas preguntas ni siquiera se mencionan las drogas, porque la adicción es una enfermedad traicionera que afecta todas las áreas de nuestra vida, incluso las que en un principio parecen tener poco que ver con la droga. Los distintos tipos de drogas que consumíamos no tenían tanta importancia, como las razones que nos hacían tomarlas y el resultado que produjeron en nosotros. La primera vez que leímos estas preguntas, nos espantó la idea de que pudiéramos ser adictos. Algunos intentamos rechazarla diciéndonos: «¡Bah!, estas preguntas no tienen sentido.» o «Yo soy diferente. Sé que tomo drogas, pero no soy adicto: tengo problemas reales de familia/trabajo/afectivos.» o «Lo que pasa es que ahora estoy pasando por una mala racha.» o «Podré parar cuando encuentre el trabajo, la persona, etc. que necesito.» Si eres adicto, antes de que puedas hacer ningún progreso hacia la recuperación, primero tienes que admitir que tienes un problema con las drogas. Estas preguntas, siempre que las hayas abordado con honestidad, pueden servir para mostrarte cómo el consumo de drogas ha hecho tu vida ingobernable. La adicción es una enfermedad que, sin la recuperación, termina en cárceles, hospitales, manicomios o con la muerte. Muchos llegamos a Narcóticos Anónimos porque las drogas ya no nos daban lo que nos hacía falta. La adicción nos quita la dignidad, el amor propio, la familia, los seres queridos y hasta el mismo deseo de vivir. Si todavía no has llegado a este punto de tu adicción, no hace falta que llegues. Sabemos que nuestro infierno estaba dentro de nosotros. Si quieres ayuda, la puedes encontrar en Narcóticos Anónimos. «Buscábamos una respuesta cuando pedimos ayuda y encontramos Narcóticos Anónimos. Llegamos a nuestra primera reunión derrotados y sin saber lo que nos esperaba. Después de haber estado en una o en varias reuniones, empezamos a sentir que los demás se preocupaban por nosotros y estaban dispuestos a ayudarnos. Aunque nuestra mente nos decía que nunca lo conseguiríamos, las personas de la confraternidad nos dieron esperanzas insistiendo en nuestras posibilidades de recuperación. Descubrimos que cualquiera de las cosas que hubiéramos

Los adictos en recuperación son la fuerza que impulsa este movimiento.

Juntos podemos lo que solos nunca podíamos.
Si sos adicto y hoy estás limpio, sos un milagro. Te necesitamos!

Las adicciones no distinguen edad ni sexo ni clase social ni geografía.

Nos atraviesan como sociedad y a todos nos afectan directa o indirectamente.

Aunque si somos conscientes de la problemática podemos combatirlas,

¡se puede!
Pero es necesario que todos nos involucremos en la solución,

¡Por muchos más Seres Libres, sumate al movimiento!